Powered By Blogger

miércoles, 21 de agosto de 2019

Diario de Cristopher


17 de agosto de 2013

Vuelvo a comenzar y no creo perder la cabeza de nuevo, aunque mi resurrección sea funesta y atípica, confío plenamente en la incertidumbre del destino, aunque no atisbe un paraíso en tus ojos, logro vislumbrar en etéreo azul profundo.
Espero no zozobrar en la noche, no quiero morir confundiendo el mar con el cielo.
La lluvia me habla en las tardes de nostalgia, la luz opaca del sol no ilumina mi horizonte, el pobre y ruin ocaso vomita un matiz pálido y lánguido, la magia de los colores se resumieron en un corazón gris que asfalta sus ideales con lágrimas y sangre.
No sé por qué percibo el mundo de esta manera, creo que me haces falta…


23 de agosto de 2013

Estoy inmerso en el mar de la confusión, no creo hallar un puerto en donde descansar, en donde anclar este barco y revisar el rumbo, me siento perdido, desconsolado, los sentimientos se han aterido por el viento penetrante de la melancolía y la pesadumbre, mis ojos se prosternan al cansancio infinito y mi respirar vehemente se apacigua y se disipa en la angustia silente. 
Admiro el ocaso y su  esencia de nostalgia, el orbe tomo un sutil matiz lúgubre, atisbo en el horizonte la fina linea que divide mis sublimes sueños de la abominable realidad, me gustaría morir en una noche estrellada, que mi óbito lo presencie millones de ángeles y que mi ataúd sea el silencio de la soledad.