acompaña mi conciencia al lado de mi corazón desvaído
aun conservo su libreta extasiada de su esencia
he de creer que la echa de menos
me falta la palabra de sus labios
sus pupilas dilatas descubriendo más de mil mundos y me llevo a conocerlos
cada día he de recolectar mi ración de zozobra
lamentos y nostalgias
invadida de miedos y amoríos ingenuos
la noche ha de ser universal
mientras se roba uno que otro pensamiento que devora mi
noche
al parecer su ser ha sido como el viento que no fue más
que un susurro
solo una firme indiferencia
empezamos a ser olvido
A: Sebastián M.
empezamos a ser olvido
A: Sebastián M.