reverberan los deseos mas recónditos de mi intrépida alma.
El ocaso esboza la sombra de tu cuerpo e ilumina tímidamente tus labios de ensueño.
Siento como el cierzo pasma mis manos y mi semblante,
y espero con ansias el oscurecer que tentará mi voluntad a cuajar sus anhelos.
El bálsamo de las tristes estrellas nos atisba sin recelo,
ella nos brinda su luz sutil y mágica oriunda del cielo.
La pudibunda luna nos regalará un segundo eterno,
un segundo prohibido, un segundo en el sibilino fuego
un segundo en el cual nuestros miedos y sueños
se plasmarán en nuestros labios de ambrosía,
un segundo que nos arrebatará la respiración, la reflexión y la sensatez..
Cuando hayamos dado nuestro último aliento
y nuestro último suspiro,
y el frío nos haya nublado nuestros sentidos
nos miraremos como completos desconocidos,
fascinados y sorprendidos...
sin miedo al mundo, sin miedo al olvido.
Wow, me encantó
ResponderEliminarhermosa composición ! son originales en la composición de verdad me encanto mucho !
ResponderEliminarGracias, a pesar de ser un joven iletrado en el amor, las palabras fluyen recatadamente ...
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ResponderEliminarno me canso de leerlo, xq sera jejeje, me gusta mucho
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