Me cansa aveces llorar ... en un rincón contiguo a la soledad

estoy desesperado, todo el paisaje es desolado...

mi mirada perdida, colmada de lagrimas contritas...

la desesperanza no nace, pero las sonrisas se disipan...




Noches como estás son inciertas y me dejan perplejo...

comienza con sonrisas pero terminan con lamentos en el viento...




"¿ Qué faltará en mi ah ?"

Esa pregunta surge cuando hay lagrimas ...

cuando hay lagrimas que narran mi dolor,

cuando hay lagrimas que ennegrecen mi corazón,

cuando hay lagrimas que asolan mi motivación...




La verdad, la vicisitud de la vida me molesta,

me parece tan nefasta como una lluvia en verano,

pero sin importar aprendo de ellas,

ya que serán las piedras del regio palacio.